La religión de la Santa Muerte ha tomado un auge importante. En playas de Rosarito en el boulevard Benito Juárez, hay una iglesia para adorar a la Santa Muerte, la iglesia Arcangelista de la santa muerte, un templo con decenas de figuras de la ‘’flaquita’’ como la llaman sus fieles.
El señor Lucino García Morales, señala que su fe a Dios lo llevó a esta religión y así crear este templo en el 2010, por adorar a la santa muerte son discriminados y estereotipados, sus feligreses son señalados como delincuentes, sicarios o narcotraficantes, dice que solo sus fieles quieren ser personas de bien, aseguró que también son discriminados por los gobiernos, debido a que desde el 2010 solicitó los permisos municipales para ejercer como iglesia y aun no se los han otorgado.
Las misas las transmite a través de internet y considera que no le están permitiendo ejercer su derecho a la libertad de culto.
Karina es devota de la santa muerte desde 1979, a los 13 años inicio su culto, menciona que la santa muerte no estaba tan estereotipada en el mundo del narcotráfico y asegura que le cumplió un milagro, el cual fue salvar a su madre del cáncer.
Tanto el Monseñor Lucino García, como sus feligreses, solo quieren que respeten su libertad de culto y dejar de ser estereotipados, dicen que esta religión es libre, debido a que se aceptan personas de la diversidad sexual y les dan el empoderamiento a las mujeres para poder ser sacerdotisas, consideran que todos los seres humanos son hijos de Dios.
Información: Ana Lilia Ramírez