Por: Victoria Ortega
TIJUANA.- En Tijuana, el ritmo de vida acelerado ha llevado a un aumento en el consumo de comida rápida y alimentos procesados debido a la conveniencia.
La creciente preferencia por alimentos altamente procesados está afectando negativamente a la salud pública, ya que estos suelen ser ricos en grasas saturadas, azúcares añadidos y aditivos, aumentando el riesgo de enfermedades crónicas como obesidad y diabetes tipo 2.
Además, la falta de tiempo para planificar y preparar comidas saludables puede resultar en decisiones alimentarias impulsivas y poco saludables.
Expertos en nutrición advierten sobre los peligros de esta tendencia, destacando la importancia de priorizar la calidad de los alimentos sobre la rapidez de su preparación.
Es esencial reconocer la importancia de una alimentación equilibrada, incluso en un estilo de vida agitado. Promover hábitos alimenticios saludables, como cocinar en casa, puede mejorar la salud y prevenir enfermedades a largo plazo.
