Desayunador Padre Chava cerrará en un mes si no consigue recursos económicos 

Sociedad

Crisstian Villicaña 

TIJUANA.- La situación económica del Proyecto Salesiano es de urgencia, al grado que en un mes dejarían de brindar alimento, albergue, atención médica y otros servicios gratuitos para la comunidad en situación de calle y a la población migrante, de no conseguir financiamiento. 

“El gas, la luz, son gastos permanentes nuestros, los alimentos que no conseguimos como el azúcar, la leche, la proteína; los niños necesitan determinados alimentos que no llegan, porque puede llegar mucho frijol y arroz, pero medicinas, transporte para cuando muchas veces alguien se siente mal poder acompañarlo hasta el Hospital General en la noche, no me dejan mentir mis compañeras, esas cosas no las recibimos de donación”, advirtió Claudia Portela, coordinadora del Proyecto Salesiano. 

El déficit del espacio es de 400 mil pesos cada mes y está aumentando, problemática que comenzó a presentarse desde el inicio de la pandemia, cuando los benefactores del proyecto comenzaron a reducir a la mitad sus donaciones, aunado a otros factores, según lo refirió el Padre Agustín. 

“Toda la canasta básica, todo ha subido bastante, claro que a los albergues nos ha pegado, a nosotros como Proyecto Salesiano a pegado el aumento y los costos, y la tercería sería el aumento de personas o el número de movilidad, sin duda, cuando llegaron en el 2015 los haitianos fue bastante el número o en el 2017, 2018 los centroamericanos y los pudimos atender, pero la cuestión es eso, el ahorro ha venido a menos porque hemos tenido la carestía por así decirlo, no hemos tenido cuesta de enero, ya es una cuesta de dos, tres años que hemos tenido que sostenernos económicamente”, detalló el Padre Agustín. 

Este último, añadió que familias de Michoacán, Guerrero, Chiapas y Oaxaca, son las que representan más del 50% de la población que atienden, siendo una situación que ha aumentado en los últimos años por la violencia. 

Con más de 37 años de ayuda, el proyecto que atiende a cerca de dos mil personas de forma diaria en sus seis espacios de Sánchez Taboada, Valle Verde, Mariano Matamoros, colonia Herrera, Zona Centro y colonia Castillo, además proporcionando desayuno y cena a los migrantes del Campo Reforma, pide a la sociedad en general ayuda por medio de donaciones en efectivo o en especie, pero en especial el llamado es a las autoridades, ya que son ellas las que deberían de hacerse cargo de la población sin hogar o migrante. 

“Hay muchos gastos por debajo, cuando alguien se enferma de los muchachos y no tiene dinero y hay que comprar medicina, porque tenemos medicinas, pero no todas, esas pequeñas cosas son las que en estos momentos nos están mermando y como decíamos con el Padre, sino pedimos ayuda tristemente capaz que tenemos que restringir servicios o dejar de brindar servicio a la comunidad, que creemos que es muy digno, porque si no lo hacemos nosotros, la pregunta sería, quién más lo va a hacer”, concluyó Portela.