Comerciantes ambulantes de la Garita de Otay en Tijuana regresaron con miedo a trabajar, luego de que fue abandonado el cadáver de un hombre por pugnas entre líderes delictivos que quieren mantener el control del lugar.
Fue a las 19:35 horas cuando se reportó el cadáver de un hombre en la garita de San Ysidro, de manera extraoficial se habla que grupos delincuenciales antagónicos se pelean el control del lugar de tráfico de drogas y personas.
La noticia afecta la imagen de Tijuana, señalan fronterizos, pues la ciudad con tantas virtudes, solo se habla de las pugnas entre células delincuenciales.
Un día antes la alcaldesa de la ciudad, Monserrat Caballero Ramírez señalaba qué reforzaría la seguridad en la garita de San Ysidro tras suscitarse hechos violentos.
“Estamos buscando por medio de todas las formas de prevenir situaciones de la violencia en la garita, una vez que se han suscitado algunos cuestiones de seguridad, entonces en ese orden de ideas vamos a destinar un grupo especializado para que esté ayudando las cuestiones de qué los personas cuenten con su documentación, nosotros no somos el referente, es el INAI, pero vamos a estar participando Ignite Estado y Federación en que haya más orden en las garitas”