TIJUANA.- Han pasado seis meses desde el primer reporte que hicieron los vecinos del fraccionamiento Villas Campestre a la Comisión Estatal de Servicios Públicos de Tijuana (CESPT) acerca del derrame de aguas negras que las 24 horas del día se encuentra activo sobre el canal pluvial.
Susana Guizar, residente de Villas Campestre, explicó que la preocupación es que al llegar el verano exista un problema sanitario, principalmente porque es una época donde abundan muchos mosquitos cerca del agua.
El derrame de aguas negras también afecta a quienes viven en la colonia Cañón del Panamericano, así lo expuso la señora María Ramírez, compartió que la saturación al servicio de drenaje viene desde la colonia el Tecolote y temen que incremente por la construcción de nuevas casas alrededor. A pesar de las continuas llamadas a la CESPT, la paraestatal no les ha dado ninguna solución.
Por otra parte, la situación se agrava por las fábricas que se encuentran cercanas. Las tuberías que se han roto derraman sus desechos directamente sobre la ladera. La intranquilidad es que el talud termine cediendo y que al caer sobre el arroyo pluvial provoque una inundación y termine por afectar el patrimonio y la salud de las más de cien familias que viven en la zona.