Luis Farfán
ARIZONA, ESTADOS UNIDOS.- Tras un partido cardíaco donde se definió hasta los últimos segundos, el equipo de Kansas City Chiefs logró vencer a las Philadelphia Eagles con un marcador de 38-35 en el Super Bowl LVII.
El jugador más valioso de la final de la NFL fue el mariscal de campo del equipo vencedor, Patrick Mahomes, quien completó 21 de 27 pases para 182 yardas y tres touchdowns, pese a jugar con una lesión en el tobillo desde el segundo cuarto.
El también MVP de la temporada regular de 27 años se afianza como el mejor en su posición, y es un fuerte candidato para tomar el relevo de Tom Brady.
Kansas City fue capaz de salir avante pese a la adversidad, pues remontó una desventaja de 24-14 al medio tiempo y se definió con un gol de campo a falta de ocho segundos para terminar el partido.
Es el tercer anillo de campeón que gana la franquicia del estado de Misuri; el segundo desde que el entrenador Andy Reid y Mahomes tomaron las riendas del equipo.
Pese a la derrota en Arizona, el quarterback de Filadelfia, Jalen Hurts tuvo una destacada participación al aportar 20 de los 35 puntos de su equipo con tres touchdowns y una conversión, empatando a James White como la mayor cantidad para un solo jugador en la historia del Super Tazón.
