TIJUANA.- De acuerdo a los avances que se han realizado durante los últimos meses, el Ayuntamiento de Tijuana anunció que contempla la apertura al tráfico en el puente de El Chaparral a finales de mayo o en la primera semana de junio.
A partir de esta fecha estimada quedaría concluido el trabajo en el área superior de la obra, no obstante, los trabajos continuarán en el área inferior con los acabados del puente para garantizar la seguridad de la movilidad de la zona.
El municipio informó que especialistas de la Secretaría de Desarrollo Territorial y Urbano y Ambiental (SDTUA), junto con supervisores externos, analizan y construyen cada adecuación del Puente El Chaparral, zona cerrada por seguridad.
Las fallas han sido reparadas con ingeniería de alta especialidad, afirmó, por lo que la entrega de la obra se ha aplazado para que al abrir de nuevo el puente a la circulación, soporte el aforo vehicular de 15 mil automóviles diarios en una longitud de 450 metros lineales.
En el cierre del carril de México hacia los Estados Unidos por el área de la Garita de San Ysidro hacia la Vía Rápida Poniente, acudieron los supervisores de la obra aprobada también por la Secretaría de Infraestructura Comunicaciones y Transportes (SICT).
De acuerdo a los proyectos y planos para la reparación, la explicación técnica detalló que el puente cuenta con cinco tableros, columnas y trabes, en la cual se realizaron inserciones y aperturas en la superficie de rodamiento para revisar la estructura.
En este proceso, el titular de SDTUA recordó que el desfasamiento de los tableros provocó la peligrosidad, además de la falta de topes sísmicos y soportes, por lo cual en este proyecto se consideraron apoyos tetrones y nuevos topes sísmicos en todos los tableros.
Aseguró que se tienen identificados los cinco tableros, los cuales se tiene un avance del 100 por ciento con el acomodo de éstos, también se cuenta con el 50 por ciento en el caso de los tetrones que en total suman 40 y que representan los soportes de losas y trabes.
Además, precisó que se logró el 60 por ciento de la colocación de topes sísmicos que garantizan la estabilidad, por lo que no se requirió la demolición como otros puentes, solo la reparación con ingeniería de alta especialidad para reforzar la estructura.
