Durante el primer cuatrimestre del año, el Centro de Recursos para Trabajadores Migrantes de Tijuana (CRTM), registró más de 300 casos donde a migrantes se les ha negado un empleo por su condición legal
Crisstian Villicaña
TIJUANA.- Los migrantes al salir de sus hogares, tienen que enfrentar abuso y rechazo laboral en ciudades fronterizas como Tijuana, donde si bien hay empresas y negocios que les dan un trabajo digno, hay otros tantos que se aprovechan de esta comunidad.
“Lo que hacen muchos empleadores o muchas personas es asustar, es decirles, como eres migrante no tienes derechos, como eres migrante yo te puedo correr cuando yo quiera o incluso los documentos o los pocos documentos que tienen se los llegan a quitar, te contrato, pero dame tus documentos originales, capaz que me robas o esto… y muchas veces lo han dejado sin documentos”, detalló la directora del Centro de Recursos para Trabajadores Migrantes Tijuana, Julia Gloria Gómez.
Tal y como pasa con los paisanos mexicanos en Estados Unidos, la población migrante que llega a Tijuana desarrolla labores con un mayor grado de peligro o incertidumbre laboral, en áreas como la construcción, servicios, trabajo doméstico, entre otros.
“Las personas migrantes tienen hasta tres veces mayor riesgo de ser víctimas de trabajo forzoso y eso es porque uno de los indicadores del trabajo forzoso es cuando las personas hacen trabajo bajo amenaza, hay otros indicadores cuando tienen restricción de movimiento porque les quitan el pasaporte, entonces esa idea a veces, de que la víctima del trabajo forzoso está escondido, encerrado en algún lugar donde no lo vemos, que eso pasa también, es también con cosas tan simples como esas, que exponemos a las personas a ser víctima de trabajo forzoso”, advirtió la especialista en migración laboral de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), Noortje Denkers.
Durante el primer cuatrimestre del año, el Centro de Recursos para Trabajadores Migrantes de Tijuana (CRTM), registró más de 300 casos donde a migrantes se les ha negado un empleo por su condición legal.
“Nosotros de este enero a abril habíamos contabilizados las atenciones que estábamos dando y eran alrededor de 670 personas que hemos atendido, solo de estos meses, de cuántas personas han sido rechazadas por el trabajo, estamos hablando que una tercera parte, más de la mitad han sido rechazados en un empleo, desde el momento que llega la contratación y que le dicen no porque eres migrante y no puedes trabajar o no porque me voy a meter en problemas, pero desconocen la Ley de Migración, del Trabajo o de tratados internacionales que tenemos bilaterales, donde el derecho al trabajo es algo que tenemos todas las personas más allá de la movilidad”, anotó Julia Gloria Gómez, directora del CRTM Tijuana.
El problema no es exclusivo de un sector migrante, incluso aquellos que cuentan con formación profesional enfrentan las mismas dificultades.
“Tienen títulos académicos, tienen competencias o experiencias laborales en ciertos sectores, pero no tienen papeles o no hay la agilidad para reconocer esas competencias o esos títulos para que se puedan integrar en el mercado laboral y terminan muchas veces en la economía informal o en trabajos para los cuales están sobre calificados”, mencionó Noortje Denkeres, especialista en migración laboral de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
Para la fundadora del Centro de Recursos para Trabajadores Migrantes, este tema significa una oportunidad para que Tijuana sea en realidad una ciudad de migrantes en todos los sentidos.
“Nos gustaría que uno de los exponentes de Tijuana no fuera por inseguridad, sino que fuera por una ciudad dentro de un Estado que lo que ofrece es empleo, es crecimiento y utilizar este tema de la migración como un catalizador de la economía local, no verlo como un tema como si fueran delincuentes, al final del día son personas que transitan por una necesidad de seguridad, por una necesidad de empleo”, precisó la fundadora del Centro de Recursos para Trabajadores Migrantes Tijuana, Miriam Sol Merino.
Por lo pronto, asociaciones civiles, agrupaciones y colectivos a favor de los migrantes, son los que se encargan de darle apoyo a esta comunidad por medio de acompañamientos, asesorías y ayuda jurídico-legal.