Crisstian Villicaña
TIJUANA.- Cómo celebra una madre el 10 de mayo si uno de sus hijos no está en casa. Qué la mueve a no parar de buscar. La respuesta la vemos en los colectivos de búsqueda de personas desaparecidas, mujeres, madres, tías, abuelas, que se reunieron este día en el Monumento a la Madre frente a Palacio Municipal.
“El desgaste a veces es físico, emocional, mental, pero hay algo que todos los días nos impulsa a levantarnos a seguir la búsqueda, que es el encontrar, el amor que tienen las familias, las madres por encontrar a sus hijos, ese es un motor que no descansa, que esta todos los días”, manifestó, Angélica Ramírez, miembro del Colectivo Una Nación Buscando T.
El Registro Nacional de Personas Desaparecidas o no Localizadas, señala que en México, dos mil 963 personas desaparecieron durante el primer trimestre de este año, las cuales se suman a las más de 90 mil que no se sabe su paradero.
Entre todos esos expedientes está el del salvadoreño Rafael Ernesto Valencia Cuellar, hijo de la señora Ruth, la cual ha visitado Tijuana en cuatro ocasiones en busca del joven que desapareció el 9 de octubre del 2012.
“Desapareció en Piedras Negras, pero lo que me ha traído hasta acá Tijuana es que en el 2020 subieron una fotografía de un joven en estado de indigencia y en la nota decía que el joven quería que su mamá viniera por él, solo que el muchacho no quiso decir el nombre de su madre, pero el parecido del muchacho con mi hijo es mucho, es demasiado”, narró la madre.
Pese a los esfuerzos de la señora Ruth, su búsqueda no ha arrojado resultados positivos, situación que no le permite vivir con tranquilidad.
“Es algo que como madre me frustra y me da mucho dolor, mucha tristeza porque no sé que fue de él, no sé que le pasó, esa incertidumbre de saber que pasó con él me mata cada día, me hunde en el dolor y la tristeza”, refirió.
Para Ruth, el panorama actual es de suma angustia, preocupación, sin embargo, el amor y fe que tiene por encontrarse con su hijo la hace soñar con volver a verlo.
“Lo abrazara y lo besara y le diría que lo amo mucho, que lo amo con todo mi corazón, como siempre le dije. Él me preguntaba, mamita me decía, me quieres y yo le decía cómo no te voy a querer hijo”, expresó la señora Ruth.
Este 10 de mayo muchas madres celebran, mientras otras esperan que la alegría vuelva a sus hogares, sus corazones.
